Cerca de 1.600 millones de personas en los países más pobres del mundo, incluyendo grupos indígenas únicos en peligro de desaparición, sobreviven gracias a que la oferta de alimentos, materiales para construcción, agua y medicinas se obtienen casi exclusivamente del bosque.
Los bosques tropicales albergan cerca del 80% de la biodiversidad mundial de flora y fauna, constituyen el hábitat de alrededor de dos terceras partes de especies sobre la tierra.
Según el Banco Mundial, la deforestación representa hasta un 20 % de las emisiones globales de gases de efecto invernadero, que contribuyen al calentamiento global, cifra similar a la generada por el sector del transporte. Por esta razón, los recursos forestales juegan también un papel clave en el cambio climático.