domingo, 29 de abril de 2012


Libélula-Luciérnaga: el nuevo humedal que nace en el río Tunjuelo

Libélula-Luciérnaga: el nuevo humedal que nace en el río Tunjuelo
Este es el humedal La Libélula - Luciérnaga formado en los límites de las localidades de Ciudad Bolívar y Tunjuelito. Abel Cárdenas

Este sistema de humedales ocupa unas ocho hectáreas. una apuesta del Distrito en materia ambiental.

La Secretaría Distrital de Ambiente (SDA) tiene avanzados los estudios para declarar como nuevo humedal de la ciudad a La Libélula-Luciérnaga. (Vea más información sobre los humedales de Bogotá)
Se trata de un ecosistema que tiene cuatro espejos de agua y se encuentra en la ronda del río Tunjuelo, en los límites entre las localidades de Ciudad Bolívar y Tunjuelito, en el sur de Bogotá.
Este sistema de humedales ocupa unas ocho hectáreas y será una de las apuestas del Distrito en materia ambiental, dado que la SDA se propone desarrollar también, en esa parte del Tunjuelo, un modelo de recuperación de ríos urbanos.
La secretaria de Ambiente, Margarita Flórez, dijo que se incluyó el proyecto en el Plan de Desarrollo porque "se quiere acabar con la segregación social y ambiental. En el sur de la ciudad se carece de áreas verdes. Con esa reserva se busca empezar a mejorar las condiciones ambientales de áreas sobrehabitadas".
El subdirector de Sistemas y Ruralidad de la SDA, Byron Calvache, declaró que La Libélula-Luciérnaga se ha estudiado y "no corresponde a simples encharcamientos. El humedal está en el meandro del río Tunjuelo y se clasifica en la categoría de humedales de planicies de inundación".
Esos terrenos, de por sí, se hallan en un área protegida, porque están incluidos en el plan de manejo y preservación ambiental del río Tunjuelo que el Distrito decretó en el Plan de Ordenamiento Territorial (POT) expedido el 2004.
Por el humedal vuelan hoy torcazas, garzas, alcaravanes, y crecen plantas como la sombrillita de sapo y el 'lulo de perro', característicos de esos ecosistemas.
Pero la fauna y flora allí escasean porque una parte de los terrenos que lo bordean fueron convertidos en depósitos de basuras y escombros, y otra se la tomaron indigentes para montar 'cambuches'.
El ecosistema está igualmente atravesado por un sendero que utilizan estudiantes y, según las denuncias, les sirve a los vendedores de droga como ruta para el comercio o para escaparse de la Policía.
Los que están más contentos con la decisión de la SDA son los vecinos, encabezados por el presidente de la Junta de Acción Comunal de Protecho, Carlos Saavedra, quien afirmó que desde hacía 15 años reclamaban ayuda para el humedal.
Ellos lo vigilan para que no lo invadan más, y para mejorarlo se rebuscaron el dinero para sembrarle 400 árboles chicalá.
Calvache dijo que "en el humedal y en ese punto del Tunjuelo se hará una rehabilitación ecológica, y trabajos de regulación hídrica para mejorar las condiciones del río".

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